Si quedaste atrapado por el romance ardiente y los giros emocionales de Pídeme lo que quieras, también conocida como Dime lo que quieras, te encantará descubrir más historias que exploran el deseo, el drama y las relaciones complejas. En este artículo encontrarás películas similares a Pídeme lo que quieras disponibles en FlixLatino, junto con otros títulos aclamados que capturan el mismo espíritu de pasión e intensidad.
1. Tres metros sobre el cielo
Ambientada en Barcelona, Tres metros sobre el cielo sigue a Hache, un motociclista impulsivo que siempre lleva los límites al extremo, y a Babi, una joven educada para evitarlos. Lo que comienza como una chispa se convierte en una relación que ninguna de sus familias aprueba, construida entre paseos nocturnos, discusiones dolorosas y momentos tan tiernos que parecen fuera de lugar en su mundo caótico.
La película no pretende que el primer amor sea sencillo. Muestra cómo la atracción puede resultar tan embriagadora como peligrosa cuando el orgullo y la imprudencia se interponen. Ver a Hache y Babi acercarse y alejarse una y otra vez resulta tan real que refleja lo que muchas veces significa enamorarse por primera vez.
Para quienes buscan un romance lleno de dulzura y riesgo, Tres metros sobre el cielo es una película imprescindible.
2. Tengo ganas de ti
En Tengo ganas de ti, Hache regresa a Barcelona cargado con el peso de un amor que no logra olvidar. Las calles siguen siendo las mismas, pero cada rincón le recuerda lo que dejó atrás. Intenta seguir adelante, y es entonces cuando Gin irrumpe en su vida.
La química entre ellos es evidente, aunque nunca resulta sencilla. Hache se encuentra dividido entre la emoción de alguien nuevo y la sombra de un recuerdo que aún persiste. Las noches de fiesta se vuelven intensas, casi temerarias, pero el pasado siempre está presente.
Lo que hace única a la película es que no presenta las segundas oportunidades como limpias o fáciles. Habla de lo complicado que puede ser empezar de nuevo y de cómo, a veces, el amor no consiste en olvidar, sino en aprender a vivir con las huellas que deja.
Si buscas un relato sobre lo difícil y emocionante que puede ser renacer después de una gran pasión, Tengo ganas de ti es la opción ideal.
3. Amor en polvo
Amor en polvo propone una mirada muy distinta al romance. La historia sigue a dos parejas que deciden experimentar intercambiando parejas con la idea de fomentar la sinceridad y acercarse más. Al principio, todo parece un juego atrevido y divertido, algo que pueden controlar. Sin embargo, cuando entran en juego las emociones, los límites se difuminan y la confianza comienza a resquebrajarse.
La película no evita mostrar la incomodidad o los momentos tensos. Una cena casual puede transformarse en un instante incómodo, y lo que empezó como curiosidad pronto revela inseguridades ocultas desde el inicio. El humor aligera algunas escenas, pero en el fondo se trata de cómo el deseo y la franqueza pueden poner en riesgo cualquier relación.
Lo que la hace especial es que se siente cercana a la realidad moderna de las parejas. Amor en polvo demuestra que la pasión nunca es tan sencilla como parece.
4. Poliamor para principiantes
Poliamor para principiantes es una comedia romántica que, bajo su tono ligero, ofrece una mirada honesta a lo complejo que puede ser el amor. La historia sigue a Manu, un hombre tradicional que de pronto se ve envuelto en una relación que no encaja con las ideas con las que creció. Al enamorarse de Amanda, una mujer que ya vive un estilo de vida poliamoroso, Manu se ve obligado a replantearse todo lo que creía saber sobre los celos, la fidelidad y el compromiso.
La película equilibra situaciones disparatadas con momentos sinceros. Una escena puede arrancar carcajadas por la ingenuidad de Manu, mientras que la siguiente revela su miedo profundo a quedarse atrás. Al mostrar tanto la locura como la vulnerabilidad, la cinta evita el cliché y logra transmitir una sensibilidad inesperada.
Con frescura y humor, Poliamor para principiantes recuerda que el amor puede adoptar muchas formas más allá de las que solemos imaginar.
5. Caribe, todo incluido
En Caribe, todo incluido, la vida de Alicia se desmorona al descubrir que su novio de toda la vida le ha sido infiel. Devastada, acepta la invitación de su mejor amiga para escapar a Punta Cana, con la esperanza de que el sol y la diversión le ayude a olvidar. Lo que parecía un viaje de chicas sin preocupaciones da un giro inesperado cuando aparece en el mismo resort el socio de su ex, decidido a recuperar una valiosa piedra desaparecida.
Entre cócteles junto a la piscina y fiestas interminables, los secretos salen a la luz y la tensión crece. Lo que comenzó como una huida se convierte en una experiencia mucho más enredada. El entorno tropical intensifica la sensación de que todo puede suceder, y para Alicia, cada encuentro pone a prueba cuánto está dispuesta a dejar atrás.
Caribe, todo incluido combina comedia, intriga y romance en una historia de vacaciones donde el paraíso guarda más de una sorpresa.
6. Sevillanas de Brooklyn
Sevillanas de Brooklyn es una película como Pídeme lo que quieras. La historia sigue a Ana, una joven de Sevilla que sueña con una vida mejor lejos de su pequeño apartamento y de las dificultades familiares. Cuando su madre decide alquilar una habitación a Ariel Brooklyn, un estudiante estadounidense de intercambio, Ana ve una oportunidad para algo distinto. Ariel llega esperando la España glamorosa de las películas, pero se encuentra en un barrio obrero donde nada se parece a lo que imaginaba.
La película se nutre de este choque de expectativas. Ana se debate entre la responsabilidad hacia su familia y su deseo de labrarse un futuro propio. Ariel, por su parte, descubre que lo auténtico tiene más valor que las imágenes de postal. La relación que surge entre ambos se construye con humor, malentendidos y el pulso cotidiano de Sevilla que impregna cada escena.
Con su mezcla de contrastes culturales y emoción sincera, Sevillanas de Brooklyn ofrece un relato encantador y lleno de verdad.
7. La ley del deseo
En La ley del deseo, Almodóvar transporta al espectador al Madrid vibrante de los años ochenta, una ciudad llena de vida nocturna, arte y una libertad recién conquistada. En el centro de la historia está Pablo, un cineasta cuya vida personal se mezcla con los guiones que escribe. Incapaz de olvidar a Juan, un actor que se le escapa de las manos, termina cruzándose con Antonio, un joven cuya pasión resulta tan intensa como peligrosa.
Lo que comienza como atracción pronto se transforma en algo inquietante. La necesidad de Antonio por Pablo se vuelve obsesiva, y la frontera entre amor y posesión se desdibuja de forma tan íntima como arriesgada. La película no teme ser erótica y a la vez mordazmente divertida, a menudo en la misma escena.
Más que un thriller o una historia romántica, La ley del deseo muestra a un Almodóvar audaz, sin miedo a revelar cómo el deseo puede tanto liberar como destruir.
8. Átame!
Átame! de Almodóvar camina por la delgada línea entre lo inquietante y lo sorprendentemente tierno. Ricky, recién salido de un hospital psiquiátrico, fija su atención en Marina, una ex actriz convertida en estrella de cine B. Su idea de romance es extrema: la secuestra convencida de que, si logra retenerla el tiempo suficiente, ella terminará enamorándose de él.
Lo que podría ser una historia de terror, Almodóvar lo transforma en algo mucho más peculiar. Marina lucha, se resiste, pero poco a poco empieza a descubrir la vulnerabilidad detrás de la obsesión de Ricky. Sus encuentros pasan de la tensión a la intimidad inesperada, sin permitir nunca que el espectador se acomode en una sola emoción.
Con el Madrid colorido y caótico como telón de fondo, la película resulta tan perturbadora como curiosamente dulce. Es una comedia oscura sobre el amor, la locura y el control, contada con la osadía que caracteriza al director.
9. Anónima
Anónima captura la electricidad y la torpeza de las conexiones adolescentes en la era digital. La historia sigue a dos estudiantes de secundaria que comienzan a escribir por error. Lo que inicia como un simple accidente se convierte en una amistad anónima que pronto parece la relación más sincera que han tenido.
El problema es que, en la vida real, estos dos ya se conocen y no se llevan nada bien. La tensión entre sus charlas secretas y vulnerables, y sus roces en persona, impulsa el corazón de la película. A través de ellos vemos inseguridades, primeros amores y la presión de descubrir quiénes son mientras intentan encajar.
El encanto de Anónima está en lo auténtica que resulta: divertida, frustrante y cargada de emoción. Es un recordatorio de que, a veces, las personas que menos esperamos son las que más nos sorprenden.
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Las películas de esta lista muestran el amor en todas sus formas: apasionado, complicado y, a veces, doloroso. Eso es precisamente lo que las acerca tanto a Pídeme lo que quieras: ninguna teme retratar lo desordenado que puede ser el deseo.
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